El 80% de los 25 millones de hogares españoles necesitan ser sometidos a procesos de rehabilitación energética urgente, según el Centro Nacional de Energías Renovables (Cener). Este organismo señala que, sin embargo, hace más de tres décadas que España aprobó su primera legislación de eficiencia energética.
Los hogares ocupan el tercer lugar entre los sectores que más energía consumen, con un 19%, al haber sido construidos con sistemasde calefacción y aislamientos térmicos antiguos. «Estamos hablando de 18 millones de viviendas en las cuales tendría sentido, desde el punto de vista de la rentabilidad económica y ambiental, implantar medidas de ahorro y rehabilitación energética», ha afirmado Florencio Manteca, director del departamento de energética de edificios del Cener.
La rehabilitación energética de una vivienda tiene como objetivo mejorar el ahorro y la eficiencia en el uso doméstico de la energía. Mirando a este objetivo trabaja «Ciudad 2020» una investigación liderada por Indra que estudia la aplicación de la tecnología en el hogar para ahorrar el 20% de energía, producir un 20% de energía renovable y reducir el 20% de las emisiones de gases a la atmósfera.
Las mejoras energéticas sobre las nuevas construcciones no son suficientes para reducir el consumo de energía y las emisiones de las edificaciones que gastan un 40% del consumo total de energía y un 36 % de las emisiones de dióxido de carbono en la UE.
Sin embargo, la tasa de rehabilitación del parque residencial en España llega a solo un 0,13 % anual, de acuerdo con estadísticas del World Wildlife Fund (WWF). Según Georgios Tragopoulos, técnico de Eficiencia Energética de WWF España esta cifra debe ser de al menos un 1,5% para «rehabilitar un 50% de las viviendas en el 2050», lo que supondría ahorros en el consumo de hasta un 83%.
Proyectos nacionales y extranjeros
Algunos proyectos pilotos ya se han implementado en el país, como la rehabilitación de 120 viviendas en el Barrio de Lourdes en Tudela (Navarra) y el proyecto Renaissance que rehabilitó 600 viviendasen el barrio de El Picarral, con una metodología desarrollada por el Cener.
En Europa, el proyecto más ambicioso es el EU-GUGLE, una iniciativa financiada por la Comisión Europea a través del 7º Programa Marco de Investigación, en la convocatoria de 2011 Smart Cities. El proyecto, que actualmente en fase de negociación y firma de contrato con la Comisión Europea, tendrá una duración de 5 años (2013-2018) y tiene un presupuesto total de 30,5 millones de euros.
De acuerdo con Rosario Heras, de la división de eficiencia energética en edificación de la Fundación Renovables, el primer paso para generar proyectos masivos de rehabilitación es la creación de una normativa. «El código técnico de la edificación que existe es para edificios nuevos, hay que trabajar en un código para rehabilitar», ha comentado.
La única legislación existente que incentiva las mejoras energéticas en edificios se enmarca en el Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitacióncuyos fondos son administrados por las Comunidades Autónomas (CC. AA.). De acuerdo con WWF, el sector de rehabilitación puede contribuir no sólo a ralentizar las emisiones de CO2, sino que podría generar 150.000 empleos sostenibles.